Brassaï, el fotógrafo de la noche
Si por algo es conocido Brassaï, seudónimo del rumano Gyula Halász (Brașov, 1899), es por sus imágenes nocturnas de París. La ciudad le conquistó desde que de niño se trasladó allí por un año tras hallar su padre trabajo como profesor de la Universidad de La Sorbona. Luego, después de regresar a su hogar, aprendió el idioma leyendo a Proust y, tras completar sus estudios en pintura en Hungría y Berlín, se mudó a la capital francesa para observar el mundo desde su bohemia. Fue entonces cuando se inició en el oficio que le haría famoso. Como él mismo escribió: “es para capturar la belleza de las calles bajo la lluvia y la niebla, es para capturar la noche de París, que me convertí en fotógrafo”.
Brassai en el Boulevard Saint-Jacques de París hacia el año 1931
Lo hizo, además, desde una perspectiva tan original como única, presentando siluetas y sombras en donde la oscuridad, la niebla y la luz desempeñaban un papel fundamental. “La noche sugiere, no muestra” –explicó una vez al referirse a su pasión por lo nocturno. “Nos inquieta y nos sorprende en su extrañeza, libera en nosotros sus fuerzas que a la luz del día están dominadas por la razón”. Buscaba, además, retratar la cotidianeidad, pero siempre desde una óptica distinta, con una atmósfera nueva y fuera de lo común. Porque a él le interesaba aquello que otros dejaban pasar sin más: los vendedores de las tiendas, los trabajadores, jardineros, pescadores, artesanos y transeúntes, como también los enamorados que paseaban y las clases populares más olvidadas y marginales de la sociedad. Incluso los graffitis de las paredes suponían para él una inspiración (allí está, por ejemplo, su serie Graffiti, aparecida en 1960
Ya en 1932 publicó su primer libro de fotografía, Paris de noche, que supuso el inicio de una carrera de renombre y por la cual acudieron a él celebridades de todo tipo. Retrató, por ello, a hombres como Henri Matisse, Alberto Giacometti, Jean Genet, Salvador Dalí o Henri Michaux, además de a Pablo Picasso, con quien trabó una buena relación de amistad (fruto de ello es su libro Conversaciones con Picasso, de 1964).
Pero los talentos de Brassaï no terminaron aquí. En vida publicó diecisiete libros, entre ellos la novela Histoire de Marie (1948) e incluso realizó una película As Long As There Will Be Beast, que en 1956 ganó un premio en Cannes. Y todo esto, mientras le iban llegando numerosos premios por su carrera.
Cuando falleció, el 8 de julio de 1984, tenía el logro de haber sido uno de esos autores capaces de crear escuela hasta entrar a formar parte de los fotógrafos más importantes de la historia. De hecho, todavía hoy sus imágenes se exponen, manteniendo la capacidad de sorprender al público que las contempla.
Vista desde el Pont Royal hacia el Pont Solférino, c. 1933
Brouillard, avenida de l’Observatoire, 1934
Pareja de enamorados y un vagabundo. Boulevard St. Jacques, París, 1932
Puente de Crimée, París, 1934
La Boule Rouge, calle de Lappe, París, 1936
Calle de Rivoli, París, 1935
El puente de las artes, París, 1934
La Bande de Grand Albert, París, 1932
Escalera en Montmartre, París, 1936
Dalí, circa 1932-1933
París
Pareja en el jardín de los Campos Elíseos, París, 1932